'Hat-trick' de Lewis Hamilton en Barcelona: victoria, vuelta rápida y liderazgo en el Mundial. Valtteri Bottas ha completado el quinto doblete consecutivo de Mercedes y Max Verstappen le ha arrebatado el podio a los Ferrari, que una vez más ha demostrado estar un paso por detrás de los favoritos. En lo que respecta a Sainz, buen papel ante sus aficionados al finalizar en octavo lugar.
Bajo un sol abrasador, el cual hacía mella en la pista, que rozaba los 42ºC, daba comienzo el Gran Premio de España 2019 de Fórmula 1. Lewis Hamilton realizaba una gran salida y se situaba en paralelo con Valtteri Bottas y Sebastian Vettel, que se pasaba de frenada y perdía sus opciones de ganar posición, mientras que el finlandés de Mercedes sufría un latigazo trasero en el monoplaza y veía cómo su compañero de equipo le superaba. Tras ellos, Verstappen, que había perdido su posición inicial con Leclerc, demostraba su gran talento y pasaba a los Ferrari, colocándose en posición de podio. A partir de entonces, la situación comenzaría a estirarse entre los cinco primeros. Los de Brackley comenzaban a marcharse, con Hamilton encadenando vuelta rápida tras vuelta rápida y el piloto de Red Bull abriendo espacio con los italianos. Mientras tanto, pocos cambios en los siguientes lugares del Top 10: Pierre Gasly se mantenía en tierra de nadie por delante de ambos Haas y con los Toro Rosso cerrando las últimas posiciones de puntos. Sin grandes altercados en la arrancada, más allá de la salida de pista de Kimi Räikkönen.
De nuevo, órdenes de equipo en Ferrari
Con una decena de vueltas transcurridas, llegaba el primer brete para el muro de Ferrari. Vettel sufría con las gomas medias tras su bloqueo en la primera curva y Leclerc se acercaba con mucho más ritmo. En el giro número doce, el piloto alemán dejaba pasar a su compañero de garaje, obedeciendo las órdenes de equipo. En ese momento, el monegasco tiraba al máximo para intentar recortar las distancias con Max Verstappen, que mostraba una gran solidez en el tercer puesto, ratificando el buen ritmo de carrera al que ya apuntaba el RB15 durante la jornada del viernes. Las distancias comenzaban a controlarse y Vettel era el primero en realizar su parada en boxes, la cual era más lenta de lo esperado (4,4 segundos). Poco después hacía lo propio Verstappen, que sorprendía al montar las gomas blandas, lo que significaba que adoptaba una estrategia de dos paradas, y Leclerc, que se decantaba por el compuesto más duro. Con la parte alta de la tabla sin demasiados cambios, era la zona media la que ponía la pimienta a la carrera. Daniel Ricciardo pasaba a Carlos Sainz justo antes de entrar ambos al pit lane, pero el piloto español le devolvía el adelantamiento al regresar a pista. Los dos luchaban por el undécimo puesto.
Tras las paradas de Hamilton y Bottas, la situación volvía a reordenarse. De nuevo, los dos Ferrari copaban el protagonismo en pista. Leclerc era lento con las ruedas duras y Vettel llegaba desde atrás mucho más rápido. El monegasco se defendía de su compañero, hasta que tres giros después le dejaba pasar y este se marchaba en busca de Verstappen, que continuaba en tierra de nadie controlando la situación. Entretanto, Kvyat superaba a Magnussen y escalaba hasta la octava plaza. Con la carrera en un momento tranquilo, Vettel realizaba su segunda parada y Verstappen le seguía los pasos una vuelta después. Ya en el giro 46, Lance Stroll y Lando Norris se encontraban en la segunda curva del trazado catalán y acababan chocando, originando la aparición del Safety Car. Hamilton, Bottas y Leclerc entraban a boxes, mientras que Sainz lo hacía más atrás y aprovechaba un problema en los pit de Toro Rosso para ganarle la posición a Albon. Con todos los coches reagrupados y la pista limpia, volvía la bandera verde. Nada cambiaba en las primeras posiciones, pero los Haas nos regalaban una bonita lucha y Sainz pasaba a Kvyat para colocarse noveno.
La zona media anima la carrera
Grosjean luchaba cuerpo a cuerpo con Magnussen y terminaba dos veces en la escapatoria, lo que permitía a Sainz acercase y atacar al francés. Tanto que al final de la recta ambos se rozaban rueda con rueda y el de Haas se iba de nuevo a la escapatoria. Finalmente, Sainz le pasaba en la gran recta principal. Kvyat hacía lo propio y ofrecía el último adelantamiento del Gran Premio. Las dos flechas plateadas de Mercedes cruzaban la línea de meta y lograban el quinto doblete consecutivo de la temporada.