2013 había marcado un punto de inflexión enorme en la carrera deportiva de Lewis Hamilton, ya que dejaba atrás al equipo en el que creció y se convirtió en campeón para apostar por el ambicioso proyecto de Mercedes. La era híbrida era el momento cuando la estrella plateada empezó a brillar y destronaba a Red Bull del trono de la Fórmula 1. Ese poderío de monoplaza, con grandes líderes y el británico al volante demuestra que es un equipo que no tiene fecha de caducidad, viendo que son imbatibles año a año. El que es ahora heptacampeón del mundo admite que ese paso de dejar McLaren a finales de 2012 podía haber sido catastrófico para su trayectoria, pero arriesgó y ganó. Él mismo afirma que deseaba con todas sus fuerzas formar parte de un proyecto desde prácticamente cero y hacerlo crecer, ya que en la escudería de Woking ya estaba todo logrado y no podía lograr lo que tanto quería.
Apostar por Mercedes ha sido un gran paso en su trayectoria
"Había estado con McLaren desde los 13 años, era mi familia, estaba a salvo y protegido allí. Pero McLaren tenía esta historia increíble, múltiples campeonatos, súper exitosos y sentía que no estaba ayudando a construir algo. Ya era un equipo brillante, ya tenía todos esos éxitos y tenían una vitrina llena de trofeos y quería ir a algún sitio donde pudiera ayudar y formar parte de la creación de algo. Cuando me uní a este equipo [Mercedes] no tenían muchos trofeos en la vitrina, estaba creciendo y hubo más personas que llegaron. Estaba como quiero ir a algún sitio y ver si puedo usar todo lo que he aprendido todos estos años, el privilegio de haber trabajado en McLaren, y aplicar todo lo aprendido a este equipo que no era muy exitoso a uno que lo fuera. Hubo momentos en los que no sabía cuándo ganaría de nuevo, tenía que analizar mucho los pros y los contra. Pienso que si no tomas riesgos en la vida, te estancas".
"A posteriori, miras si me hubiera quedado allí, no hubiera tenido otro campeonato a mi nombre, después de 14 años hubiera tenido un solo campeonato. Las cosas pasan por algún motivo de una forma u otra, estoy muy agradecido por el paso que di, di un salto de fe. Gracias a gente como Niki [Lauda], a Ross [Brawn] y a Mercedes por haber confiado en mí", ha finalizado el que ha superado al más grande de la historia de la F1, en palabras recogidas del podcast Crowdstrike, uno de los patrocinadores de Mercedes.