Tanto en clasificación como en carrera, el heptacampeón del mundo no ha conseguido sacar un extra de rendimiento a su monoplaza que le sirviera estar a la altura de los Ferrari, ya que Red Bull sigue estando un nivel superior al resto de adversarios. A pesar de las dificultades con la competitividad, Hamilton se esforzó al máximo, pero los resultados no fueron especialmente alentadores. En esta ocasión, estuvieron un paso por detrás de sus rivales directos, pero seguirán trabajando para progresar con el paso de los Grandes Premios.
Lewis Hamilton:
"El momento del coche de seguridad no fue el ideal, aunque no pude quedarme estancado en esa frustración, tuve que bajar la cabeza y concentrarme en atacar. Disfruté de las batallas con los coches que me rodeaban, el Ferrari de Sainz fue un poco más rápido que nosotros en la recta, incluso con el DRS abierto. Tuve que dar todo lo que tenía para intentar adelantarle. Estoy orgulloso de mi equipo, no tuvimos el ritmo que teníamos en Melbourne, el cual no ha sido grandioso, pero no hubo falta de motivación. Estamos hambrientos, ojalá este sea el comienzo de algo mejor en las próximas carreras. Una vez consiga esa confianza en el coche, el ritmo llegará".