El año 2022 está siendo realmente competido en el equipo Mercedes, y es que a falta de tres Grandes Premios para el final de la temporada, son solo 20 los puntos que separan a sus dos pilotos, si bien pocos esperaban que esta ventaja cayera del lado de George Russell, quien está realizando un gran trabajo en su primer año con los de Brackley y, a base de regularidad y disciplina, le está poniendo las cosas muy complicadas a todo un siete veces campeón del mundo como Lewis Hamilton. Ambos pilotos han logrado siete podios cada uno en lo que va de campaña y aún esperan seguir dando guerra y sumando un buen botín de puntos, por lo que todo puede pasar.
En una entrevista concedida a la BBC, el número '44' ha querido hacer hincapié en que es él quien está llevando a cabo prácticamente todas las labores de la puesta a punto del W13, aunque reconoce que es algo lógico teniendo en cuenta su trayectoria junto a los alemanes. Por otro lado, asevera que no hay rivalidad con Russell por acabar delante en la tabla, pues pelean por un puesto insignificante, aunque admite que la situación sería muy diferente si estuvieran al frente de la parrilla.
Solo le interesa ganar
"George está en su primer año con el equipo, así que ha llegado y está demostrado de lo que es capaz. Está llevando a cabo su trabajo, con muy pocos cambios en la puesta a punto. En contrapunto, a mí me toca hacer trabajo de pierna, aquí y allá, con diferentes alas y otro tipo de piezas, si bien es algo que me gusta hacer de todos modos. Tengo grandes conversaciones con la gente con la que llevo trabajando diez años. Hablé con Andrew Shovlin con argumentos constructivos, y si llegamos a 2023 con un coche con el que estemos mucho más contentos, sin tener que probar locuras con la puesta a punto, esperamos tener mejores batallas", ha comentado el de Stevenage.
"George está haciendo un gran trabajo y no tengo problemas, todo va bien entre bastidores. Él y su equipo no han experimentado lo mismo, como es obvio, pero es por el hecho de que yo llevo aquí mucho tiempo, de modo que estoy abierto a tomar estos riesgos. Si acaba delante de mí en el Mundial a final de temporada, no es importante para mí, no estamos luchando por el título. Somos cuarto y sexto en este momento. En caso de que estuviésemos primero y segundo, la cosa cambiaría", concluye.