Esta primera parte de la temporada está cargada de circuitos urbanos, como ha sido el caso de Arabia Saudí, Australia, Azerbaiyán y la siguiente es cruzando el Océano Atlántico. La pista de Miami combina las zonas rápidas del primer sector, pero la segunda mitad en adelante se complica al tener curvas de baja velocidad. Por si no fuera suficiente desafío, los muros también están cerca, por lo que la concentración debe ser máxima y hay pocos lugares para descansar. Magnussen está emocionado por afrontar esta cita, el trazado es exigente, pero el calor y la humedad son dos factores que suman dificultad.
Kevin Magnussen:
"El año pasado fue muy caluroso y húmeda. Es una pista física, no es la que más en términos de diseño, pero es dura y la meteorología también lo es. Considero que es un lugar difícil para poner una pista de Fórmula 1, así que tuvieron que ingeniárselas para hacer algo divertido. El primer sector es divertido, es la parte rápida del trazado, con esas eses y las frenadas de las curvas 7 y 8 son complicadas. Pero la parte más exigente es la que está debajo del puente, antes de la larga recta de atrás".