Aunque el neerlandés haya calificado en tercera posición, por detrás de ambos Ferrari, tenía claro que saldría con el cuchillo entre los dientes desde la salida para optar a la victoria. Cuando se apagaron los semáforos, Max adelantó a Sainz en la curva 2 y luego superó a Charles Leclerc en la novena vuelta, poniéndose en cabeza.
La ventaja que tenía sobre el monegasco fue creciendo, pero el coche de seguridad hizo que esa diferencia cómoda desapareciera de un plumazo y hubiese batalla hasta el final. Sin embargo, el campeón del mundo tuvo el ritmo necesario para tener controlado a Leclerc hasta la bandera a cuadros.
Max Verstappen:
"Fue una carrera dura físicamente, creo que debo haber perdido tres kilos. Tuvimos un ritmo realmente bueno con el neumático medio y, sin duda, me ha ayudado para hacer mi carrera. Una vez tuvimos el pit stop, estuve controlando el tiempo con Charles, estuvimos muy igualados con el neumático duro. Luego el coche de seguridad salió, lo que hizo que fuera más entretenido para los aficionados y tuve que empujar fuerte hoy. Estoy súper contento por el equipo, ya que no tuvimos un gran comienzo de fin de semana".