La jornada para Mick Schumacher fue bastante corta hoy, fuera del coche en el FP1 y problemas en el FP2. Ese podría ser un resumen breve para lo que ha sido el día del piloto alemán en el templo de Monza, pues en la primera de las sesiones tuvo que dejar su coche a Antonio Giovinazzi. Regresó al volante para la sesión vespertina, pero el trabajo le duró más bien poco. Su coche fallaba y perdía ritmo en mitad de una de las vueltas y desde el muro le daban la orden de pararlo rápidamente, por lo que acabó aparcando al margen derecho de la pista y regresando al garaje para acabar allí la sesión analizando lo sucedido.
Mick Schumacher:
"Desafortunadamente, tuvimos un problema con la ECU que no fue muy bueno, pero estas cosas suceden y solo tenemos que trabajar un poco más mañana. Hice tres vueltas rápidas en las que no es mucho, así que, definitivamente, tendremos que intentar dar algunas más mañana. Lo haremos rápidamente porque conozco esta pista bastante bien, así que espero que tengamos una buena puesta a punto para mañana y dar lo mejor de nosotros".