El piloto arrancó el fin de semana como piloto invitado a los FP1 con Aston Martin y acabó llevando a los puntos a Williams el domingo. Quién se lo iba a decir a él cuando emprendía el vuelo con destino a Monza, su oportunidad con Willams surgió de un momento a otro tras la noticia de que Albon no iba a poder continuar. Fue entonces cuando Nyck no lo dudó un segundo y aceptó el reto. La instalación llevó su tiempo, aunque fue exprés, no había de otra.
La clasificación fue bastante bien pasando a Q2, las penalizaciones le dieron un empujón favorable y el resto se lo fabricó él mismo sobre el asfalto. Finalizó en novena posición, llevando buenos puntos a casa y el coche a salvo en su primera carrera en la F1. Su compañero no logró finalizar en la zona privilegiada que otorga puntos pese a tener más experiencia en la categoría y en el equipo.
El piloto neerlandés acabó exhausto y necesitó ayuda de sus mecánicos para salir del coche, sus hombros quedaron doloridos tras el esfuerzo. Pero seguro que, sin duda, ha merecido la pena aceptar esta oportunidad y mostrar sus capacidades de cara a una posible oportunidad el año próximo.
Nyck de Vries:
"Me siento muy bien hoy y creo que fue crucial hacer un buen comienzo y una carrera limpia en la primera vuelta. Me subí a un tren DRS que me ayudó a mantenerme con el grupo; sin embargo, creo que el ritmo fue realmente bueno e tomamos una buena decisión sobre estrategia y gestión de neumáticos".
"Ser el piloto del día me hace muy feliz y estoy muy complacido y agradecido de que me hayan dado la oportunidad y la agarré con ambas manos. Fue un gran día para el equipo y, aunque las penalizaciones en la parrilla jugaron a nuestro favor, finalmente hicimos una gran carrera, así que estoy muy feliz por todos en el equipo y por mí mismo".
"Ojalá tenga una oportunidad el próximo año, pero este es definitivamente un sueño hecho realidad y estoy muy impresionado con lo que hemos hecho en poco tiempo, así que iré a disfrutarlo ahora".