Pirelli llevará por primera vez los compuestos más blandos de su gama de neumáticos para este fin de semana de carrera. Como es habitual, la suministradora italiana ha optado por esta decisión debido a las características del circuito urbano de Montecarlo. Mario Isola considera que el C5 tendrá un funcionamiento mejor respecto al que se vio con el Hiperblando en la temporada anterior gracias a su rediseño de su estructura. Con este punto a favor, el graining será inferior cuando las temperaturas de la pista sean bajas, por lo que los pilotos podrán ir al máximo y no tendrán que preocuparse en exceso por la degradación. No obstante, el jefe de la marca destaca que los Safety Car volverán a tener un rol fundamental en la carrera y afectará directamente en la estrategia de los equipos. Por consiguiente, los pit stops decidirán si un piloto gana o pierde posiciones el domingo.
Mario Isola, responsable deportivo de Pirelli Motorsport:
"Como era de esperar, llevamos nuestros neumáticos más blandos para Mónaco. El compuesto C5 es equivalente al Hiperblando del año pasado, pero el de ahora está diseñado para que tenga menos graining en temperaturas bajas y da la opción a que los pilotos los expriman desde el principio del stint hasta el final. Gracias a esto, no habrá una gran gestión de las gomas como sucedía con el Hiperblando en 2018. El de Mónaco es un Gran Premio en el que cualquier oportunidad estratégica hay que aprovecharla, especialmente si sale el Coche de Seguridad. Los adelantamientos son prácticamente imposibles aquí, como lo demostró Daniel Ricciardo que se llevó la victoria desde la pole position aunque tuviera problemas técnicos significativos en 2018. El tiempo perdido y ganado en los pit stops será crucial".