La escudería norteamericana arrastra el problema de calentamiento en los neumáticos desde las últimas carreras, lo que ha provocado que perdiera buenos resultados. Por si no fuera suficiente, la fortuna tampoco está de su lado a la hora de la verdad. En la clasificación de hoy, Kevin Magnussen y Romain Grosjean superaron la primera eliminatoria in extremis, ya que se salvaron por 88 milésimas de caer en Q1. Los pilotos finalizaron en decimotercera y decimocuarta posición. En la siguiente ronda, el danés había entrado en el Top 10 gracias a su primer stint con el compuesto más blando, pero su participación en Q3 estaba en peligro porque Max Verstappen podía adelantarle.
No obstante, cuando faltaba pocos segundos para el final, Magnussen golpeó su rueda trasera derecha en el Muro de los Campeones, perdió el control de su VF-19 e impactó contra el lateral de la recta principal. Tras este suceso, la bandera roja ondeó sobre el trazado y los pilotos de detrás no tuvieron la oportunidad de mejorar su tiempo anterior. Entre los perjudicados, se encontraba su compañero de equipo que había optado a una único intento, por lo que calificó en decimoquinta plaza porque no había marcado un registro previamente.
Romain Grosjean (15º - Sin tiempo):
"No tuve la mejor de las suertes otra vez. El día no ha sido sencillo porque tuvimos una rotura en el alerón trasero en los Libres 3, por lo que afrontamos la clasificación sin haber probado los neumáticos blandos. La Q1 fue bien, pero me la jugué a una estrategia agresiva en Q2. En mi primer intento, bloqueé en la sexta curva, por lo que no pude terminar mi vuelta; mientras que mi segundo intento se interrumpió por la bandera roja. Quizá debíamos haber sido más conservadores, pero estuve contento optar por una vuelta. Aunque fue una lástima, no sabíamos si llegaríamos a Q3, pero quizá nos hubiéramos quedado a las puertas del Top 10; hubiera sido una buena posición para mañana".