Durante la primera parte de la temporada, el español no fue capaz de extraer el máximo rendimiento de su monoplaza al no sentirse cómodo con su comportamiento. Esto hizo que estuviera lejos de los rivales de delante y fuera perdiendo puntos por el camino. Una vez había alcanzado un buen nivel de competitividad, los abandonos por fiabilidad le golpearon una y otra vez.
Los dos ceros prácticamente consecutivos en Azerbaiyán y Austria le hicieron mucho daño en el campeonato, ya que fue una desventaja que fue difícil reducir con su compañero y los pilotos de Red Bull. Ahora hay que poner la mirada en 2023 para llegar en un estado de forma espléndido.
Carlos Sainz:
"El primer tercio de la temporada ha sido exigente, he tenido serias dificultades con el equilibrio del coche en cuanto a mi estilo de pilotaje, el coche no se ajustaba a mí por alguna razón y tuve que luchar demasiado. En el segundo tercio estuvo más contento, tuve más ritmo, pero sufrí muchos abandonos y muchos problemas de fiabilidad. Además, parece que Mercedes y Red Bull hicieron una segunda mitad de año mejor. Estoy orgulloso del progreso que he hecho dentro del coche, me aseguraré de que vuelva a ser el Carlos de 2021 el próximo año y consiga buenos resultados".