Dice el refrán que "no todo es como empieza, sino como acaba", y seguro que en el garaje de Mercedes utilizaron estas palabras en más de una ocasión durante los test invernales. Y es que la pretemporada nos hacía indicar que Ferrari estaría al frente en las primeras carreras y los de Brackley irían a su rebufo, pero esta idea se diluyó por completo en Australia. Los de Maranello llegaban a Melbourne con el optimismo por las nubes, mientras que los alemanes lo hacían cargados de dudas. Sin embargo, todo dio un giro de ciento ochenta grados. Ahora, cinco Grandes Premios después, el análisis de la temporada nos lleva a un punto muy diferente. Mercedes ha logrado cinco dobletes consecutivos y se encuentra 96 puntos por delante de su máximo rival, que a su vez está travesando un momento crítico, pues su propio jefe, Mattia Binotto, ha reconocido recientemente que el equipo podría haber cometido un error con el concepto del SF90. Unas palabras que difieren mucho de las emitidas por el máximo responsable de las flechas plateadas, Toto Wolff, quien asegura que ellos plantearon un concepto del W10 con el que comenzarían siendo algo menos competitivos (como quedó demostrado en los test) para luego ir evolucionando carrera tras carrera. Y qué duda cabe de que están cumpliendo con sus propósitos.
"Solo estamos en la quinta carrera, por lo que todavía nos queda mucho potencial por exprimir del coche. Por eso también decidimos tomar este camino. Creímos que con el concepto de alerón delantero que seguimos hay más potencial a largo plazo, siempre con el riesgo de sufrir a corto plazo", ha comentado en unas declaraciones recogidas por el portal web Race Fans.
Mejor paso a paso
Del mismo modo, el austriaco asevera que lo importante no es empezar siendo el mejor, sino evolucionar y encontrar la competitividad necesaria para estar en la lucha de manera constante, que es el ideal que persiguen ellos como equipo: "Es interesante todo lo que ha sucedido durante los últimos meses, porque cuando ves quién estaba delante en los test de invierno, te das cuenta de que es muy diferente a quien está delante a día de hoy, y lo mismo ocurre si te fijas en la lucha de la zona media de la parrilla, de modo que había dos conceptos aerodinámicos, y quizás haya algo de verdad en eso, pero en la Fórmula 1 nunca hay una sola pregunta, y tampoco una sola respuesta o un remedio que justifique un buen o un mal rendimiento. Creo que se trata de desarrollar el coche y de mantenerse fuerte con esos desarrollos. Todo lo que intentamos hacer es añadir rendimiento de un fin de semana a otro en la parte de hardware y software, pero también en la comprensión del monoplaza, de la configuración y de los neumáticos", ha proseguido Wolff.
Por otra parte, hay que recalcar que se avecina una actualización en la unidad de potencia de los hombres de Brackley, ya que todo apunta a que introducirán su segundo motor en el Gran Premio de Canadá (antes se darán cita en Mónaco). Hasta ahora, la potencia es el único apartado en el que Ferrari ha dominado sobre su gran adversario, de modo que esta novedad podría acabar definitivamente con las opciones de los italianos si estos no logran dar de inmediato con la solución a todos sus problemas: "Quedan por llegar mejoras en la unidad de potencia, pero también es cierto que no serán pasos enormes como los que hemos visto en el pasado. Aun así, se está trabajando mucho para el segundo motor. Respecto a sacar un mayor rendimiento del chasis, creo que tenemos todavía buenas ideas", señala a modo de conclusión.