El Gran Premio de México podría ser sinónimo de celebración para Mercedes si Lewis Hamilton finalmente se alza con su quinto título Mundial. Algo que parece muy probable, pues con 75 puntos en juego, la distancia del piloto británico sobre Sebastian Vettel es de 70 puntos. Sin embargo, el jefe del equipo de Brackley, Toto Wolff, no duda en afirmar que aún no hay nada decidido en ninguno de los Campeonatos, por lo que están obligados a trabajar al cien por cien de sus capacidades para brindar su mejor versión en el trazado mexicano, sobre todo teniendo en cuenta el devenir de la escudería de Brackley en este circuito, donde en años anteriores ha sufrido más de lo esperado sobre la pista, principalmente valorando su superioridad respecto al resto de adversarios.
Por otro lado, Wolff comparte las palabras de la gran mayoría de pilotos de la parrilla y señala la altitud del Autódromo Hermanos Rodríguez como uno de los principales hándicaps de este trazado, pues este hecho implica una mayor exigencia para los monoplazas y, por ende, sus unidades de potencia. Del mismo modo, reconoce que espera una igualada batalla con Ferrari y Red Bull. Recordemos que la temporada pasada fue Max Verstappen quien se hizo con la victoria. Además, el piloto neerlandés llega con la moral alta tras su segundo puesto en Austin. Lo mismo ocurre con Kimi Räikkönen, que en Estados Unidos logró un sorprendente triunfo tras cinco años de sequía. Es por ello por lo que el máximo mandatario de Mercedes aboga por no confiarse y continuar bregando hasta alcanzar el objetivo final: la consecución de los dos títulos Mundiales.
Toto Wolff, jefe de Mercedes:
"El Gran Premio de Estados Unidos confirmó lo que veníamos diciendo desde antes de la celebración de la carrera: la lucha por el Campeonato de este año todavía está lejos de finalizar. Si bien Lewis pudo ampliar su ventaja respecto a Sebastian Vettel en Austin, perdimos puntos ante Ferrari en el Campeonato de Constructores. A día de hoy tenemos una batalla en nuestras manos, por lo que deberemos seguir presionando si queremos ganar los dos títulos. No podemos estar contentos con el resultado obtenido en Texas, pero es cierto que este nos brinda la oportunidad de aprender y volver más fuertes este fin de semana. Nuestra próxima parada nos llevará a la Ciudad de México, donde afrontaremos un desafío muy diferente".
"El Autódromo Hermanos Rodríguez es atípico, debido sobre todo a su altitud y a las exigencias que este factor supone para los coches y las unidades de potencia. Ha sido una de las pistas menos favorables para nosotros en años anteriores, de modo que esperamos una dura pelea tanto con Ferrari como con Red Bull. El pronóstico del tiempo habla de condiciones similares a las que tuvimos en Austin, por lo que se podría volver a limitar el funcionamiento en seco. Somos conscientes de que no será una carrera fácil para nosotros, pero todos en el equipo están concentrados, motivados y decididos a mantener la presión hasta la bandera a cuadros en Abu Dabi".