En la última carrera celebrada del campeonato, Mercedes no estuvo al mismo nivel que en las citas anteriores, lo máximo fue aspirar a la quinta plaza. A pesar de no tener ritmo para más, el sexto y octavo puesto tuvo un sabor amargo, lucharon tanto durante la sesión que este resultado supo a bastante poco. Wolff afirma que la falta de optimización de los reglajes fue la principal causa de que el W14 no fuese más competitivo en esta ocasión. Eso sí, el panorama cambia en cada Gran Premio, por lo que las mejoras y la optimización será clave de ahora en adelante.
Toto Wolff:
"Estamos emocionados por volver a pista tan rápido después de un fin de semana interesante, pero exigente en Bakú. El nuevo formato sprint arroja sorpresas y ahora necesitamos evaluar los méritos y los ajustes que son necesarios. Desafortunadamente, no tuvimos nuestro coche en la ventana de reglajes correcta durante las prácticas, esto hizo que el resto del fin de semana fuese más difícil. Nuestro ritmo de carrera parecía competitivo contra los Ferrari y los Aston Martin, pero como adelantar era tan complicado, no pudimos poner esto a prueba. Aquí es donde está nuestro coche ahora mismo, pero también tenemos saber que las pequeñas diferencias pueden tener un fuerte impacto fin de semana tras fin de semana".