Uno de los grandes candidatos a pelear este año por el tercer puesto del Campeonato de Constructores es McLaren. El equipo de Woking ofreció grandes sensaciones durante los test y las ratificó en la primera cita del calendario gracias al cuarto puesto de Lando Norris y al séptimo de Daniel Ricciardo. Su tendencia es claramente ascendente de un tiempo a esta parte y a día de hoy parecen estar un paso por delante de sus rivales más directos, especialmente en las tandas largas. Su CEO, Zak Brown, asevera que una parte crucial de este notable rendimiento recae en manos de Andreas Seidl, a quien nombró jefe del equipo en el año 2019 y del que solo tiene buenas palabras. Y es que el ingeniero alemán ha sabido enderezar una escudería que vagaba sin rumbo en la zona media-baja de la parrilla en su última etapa. Ahora todo ha cambiado y, según Brown, el de Passau tiene absoluta libertad para manejar a McLaren como crea conveniente.
Progresa adecuadamente
"Creo que la estructura que tenemos en McLaren nos funciona muy bien. Andreas y yo tenemos una excelente relación de trabajo. Considero que está muy claro cuál es mi papel, así como cuál es el papel de Andreas, y también está muy claro para el equipo. No sé cómo dirigir una escudería de Fórmula 1, no es mi competencia. Eso es en lo que Andreas es increíble, por lo que mi trabajo es darle la libertad, el apoyo y los recursos financieros para permitirle hacer lo suyo. Él tiene plena autoridad para dirigir el equipo de F1 como mejor le parezca", ha señalado en declaraciones recogidas por el portal web estadounidense Motorsport.